29 agosto, 2007

Reglamento para la industria del libro


El primer reglamento dado por los Reyes Catolicos en Toledo el 8 de julio de 1502, para ordenar el ejercicio del arte e industria del libro, obligaba a los editores, impresores y libreros a solicitar licencia para publicar cualquier obra; al contraventor se le quemaban los libros, con perdida del precio recibido y al pago de otro tanto como valiesen los volumenes. Pero todavia hasta mediados del siglo XVI los libros se reproducian y eran puestos a la venta con bastante libertad.

El Librero y su mundo” J.A. Castro Fariñas; Madrid; Paraninfo, 1963

25 agosto, 2007

Mapas robados en la Biblioteca Nacional

Mapamundi, xilografía que figura en la “Cosmographia” de Claudio Ptolomeo impresa en Ulm, 1482 (Biblioteca Nacional I/1475).

La Geographia del astrónomo y geógrafo
griego Claudio Ptolomeo: un códice
manuscrito del siglo XV, traducido al latín
por el florentino Giacomo d’Angelo, acompañado
de un mapamundi y veintiséis mapas
parciales iluminados; un incunable, impreso
en Ulm por Leonardo Holle en
1482, con treinta y dos mapas coloreados,
que destaca por su belleza y por la utilización
de xilografías para su estampación.

23 agosto, 2007

Mandamientos del buen librero

Don Alfredo Marqueríe se manifestaba de esta forma; ¿Como debe ser el librero ideal? La primera respuesta a esta pregunta enfoca fatalmente a un angulo humoristico. Ese librero ideal seria... el que nos regalara los libros. Pero no, el tema es profundo y serio.
Don Alfredo nos aporta unos “Mandamientos del buen librero” que escuchó no se donde y que desde luego no estan escritos en ningun sitio. Son estos:
1º Amar al libro.
2º No equivocar los titulos.
3º Estar siempre en la tienda.
4º Hablar bien de todos los autores.
5º Buscar siempre el libro pedido como y donde sea.
6º Sonreir al cliente y no contarle cuentos.
7º Llevar la contabilidad al dia.
8º No hablar de la crisis de la poesia o de la novela.
9º Elogiar a los restantes libreros.
10º Innovar el arte del escaparate.

El Librero y su mundo” J.A. Castro Fariñas; Madrid; Paraninfo, 1963

21 agosto, 2007

Libros prohibidos en el Indice de 1583

Index librorum prohibitorum de 1583.


Otro si se prohiben todos los libros, tratados, cedulas, memoriales, receptas y nominas para invocar demonios por qualquier vía y manera, ora sea por nigromancia, hydromancia, pyromancia, aeromancia, onomancia, chiromancia y geomancia, ora por escriptos y papeles de arte mágica, hechicerías, bruxerias, agueros, encantamientos, conjuros, cercos, characteres, sellos sortijas y figuras.
También se prohíben todos los libros, tractados y escriptos, en la parte que tratan y dan reglas y hazen arte o sciencia para conocer por las estrellas y sus aspectos o por las rayas de las manos lo por venir que esta en la libertad del hombre y los casos fortuytos que han de acontescer, o que enseñan a responder lo hecho o acontescido en las cosas passadas libres y occultas o lo que succedera en lo que depende de nuestra libertad, que son las partes de la judiciaria que llaman de nascimientos, interrogaciones y electiones. Y se manda y prohibe, que ninguna persona haga juyzio cerca de las cosas suso dichas. Pero no por esto se prohiben las partes de la astrología que tocan el conocimiento de los tiempos y successos generales del mundo, ni las que enseñan por el nacimiento de cada uno a conoscer sus inclinaciones, condiciones y qualidades corporales, ni lo que pertenece a la agricultura y navegación y medicina y las electiones que cerca de estas cosas naturales se hacen. En los conjuros y exorcismos contra los demonios y tempestades, demás de lo que el rezado romano ordena, se permite solamente lo que en los manuales ecclesiasticos esta recibido por uso de las yglesias visto y aprobado por los Ordinarios.
(Index et catalogus... (1583), h. 3r-4v).

16 agosto, 2007

Cita de Leonardo


Leonardo Da Vinci
(1452-1519)

"Leeme, lector, si mi discurso te deleita, porque
raro es el que vuelve a nacer en este mundo, que pocos
tienen la perseverancia de proseguir esta profesión
volviendo a inventar de nuevo cosas parecidas.
Y venid, hombres, a ver milagros que mediante estos
estudios se descubren en la naturaleza."
Leonardo da Vinci


Códice Madrid I, folio 6r. Biblioteca Nacional de España, Madrid.

14 agosto, 2007

Santa Wiborada



El barón Ernouf ha reivindicado hace unos cuarenta años para una Virgen y Mártir del siglo X el glorioso titulo de “Patrona de los bibliófilos”. Ha colocado a todos los amigos de los libros bajo la protección de Santa Wiborade (Weibrault, mujer sabia y de buen consejo) que, procedente de una rica y poderosa familia de Suavia, se retiró a una celda vecina del monasterio de Saint-Gall, y se ocupó en bordar y ornar las telas destinadas a cubrir los numerosos y suntuosos manuscritos que poseía este monasterio. Una horda de bárbaros y paganos procedentes de Hungría habían invadido el país, la noble reclusa corrió hacia los monjes profiriendo este grito, que llenó de entusiasmo al barón biógrafo y mereció todavía el reconocimiento de todos los bibliófilos: “¿Salvad los libros! ¡Cogedlos! ¡Inmediatamente ocupaos en poner al abrigo o a salvo los vasos sagrados!” El haber pronunciado estas palabras le valió rápidamente el castigo, así como una inmediata recompensa celeste. Tan pronto como los bárbaros partieron, Wiborada fue encontrada muerta en su celda, destrozada la cabeza por tres golpes de hacha y bañada en sangre.(1)
(1) Barón Ernouf, “Una martyre bibliophile”. Bulletin du Bibliophile, 14 serie, 1860, Págs. 1.429-1.446)

Bibliofilia y comercio del libro antiguo. Javier Lasso de la Vega. Madrid; El Bibliófilo; 1947.

13 agosto, 2007

Notificación a los libreros en 1629

Lo que por orden de la Santa General Inquisición se notifica y manda a los libreros, so pena de excomunión mayor pena de veinte ducados, es en particular y por menor lo siguiente:

1 Que hagan listas de los libros impressos y de mano escritos que tuvieren en su poder ageno, estando por su cuenta, y los entreguen al Padre Juan de Pineda de la Compañía de Jesús, que para lo dicho y visita de libros y librerías tiene comission general.

2 Que exhiban los Catálogos de Francofordia antiguos y nuevos, si los tuvieran; y den noticia si saben quien los tenga.

3 Que exhiban qualesquier libros contenidos en el Catalogo del año de 612, que no estuvieren legítimamente expurgados y firmados de quien para ello hubiere tenido Comission; mas los que después aca se hubieren prohibido o mandado expurgar hasta ese año de 629.

4 Que si fuesen llamados para hazer lista o tassacion de qualesquier libros, o liberáis, traigan las tales memorias y listas al dicho padre Joan de Pineda.

5 Que si les vinieran a vender o de otra qualquier manera vinieren a sus manos qualesquier libros de qualquier persona particular que tengan necessidad de expurgarse, o sean prohibidos, los retenga en si, y den aviso al dicho Juan de Pineda, o al Consejo de la Santa General Inquisición.

6 Item si vinieran a sus manos algunas balas, o paquetes de libros cerrados de qualesquier partes, no los abran sin dar aviso al dicho padre Joan de Pineda, o al secretario diputado por el Consejo de la Santa general Inquisición, que es el licenciado Sebastián de Huerta. Y assi mismo si supieren que qualquier otro los haya recibido sin haber dado el dicho aviso.

[El resto es manuscrito]
La villa de Madrid a veinte y dos días del mes de março de mill y seyscientos y veinte y nueve años. Yo Vicente Moyx, familiar y notario del Santo Oficio de la Inquisición de la ciudad y reyno de Toledo y de la visita general de las librerías de esta corte, que esta cometida al padre Juan de Pineda, religioso de la Compañía de Jesús, lei y notifique el orden y mandato arriba contenido a Geronimo Curbes, librero, el qual dijo que estaba presto de hacer y cumplir lo que por el se le manda. Y ansi mismo advertí de la obligación que tiene de tener en su poder el primero y segundo apendix hecho después del Catalogo del año de seiscientos y doce, so las penas arriba contenidas. Y habiéndolo entendido, dijo que lo oía, de que doy fe Vicente Moix, notario. Juan de Pineda.
(AHN. Inquisición, lib. 1268, h. 1.519 r).

10 agosto, 2007

Entremés de Cervantes



“Sabéis leer, Humillos?
-No, por cierto,/ ni tal se probará
que en mi linaje/ haya personas de tan poco asiento
que se pongan a aprender esas quimeras
que llevan a los hombres al brasero
y a las mujeres a la casa llana.
leer no sé, más sé otras cosas tales
que llevan a leer ventajas muchas (...)
sé de memoria/ todas cuatro oraciones y las rezo
cada semana cuatro o cinco veces (...)
con esto y con ser yo cristiano viejo
me atrevo a ser senador romano”.

(Miguel de Cervantes)
Entremés de la Elección de los Alcaldes de Daganzo

09 agosto, 2007

Juan de Espina


El sacerdote Juan de Espina (Ampuero 1568-Madrid 1643) científico, musicólogo e intérprete virtuoso de la lira y la vihuela tenia una buena colección de curiosidades, obras de arte e instrumentos musicales, aunque tenia fama de mago y de hombre extraño, no se sabe si tuvo una gran biblioteca, pero basta saber que poseía los dos códices de Leonardo da Vinci, que probablemente son los que se conservan hoy en la Biblioteca Nacional, y que tras su muerte pasaron al Rey por una disposición testamentaria.

08 agosto, 2007

Francisco Pérez Bayer


La erudición valenciana tuvo un momento brillante en el siglo XVIII con hombres como, el gran bibliotecario, bibliófilo, erudito, catedrático, canónigo y consejero D. Francisco Pérez Bayer (1711-1794). Desde 1783 fue bibliotecario mayor en la Biblioteca Real. Y tuvo el loable gesto de donar su biblioteca a la ciudad de Valencia: “Hallándose dueño este ilustre sabio de una exquisita colección de libros de varios idiomas y de todas facultades, adquiridos a costa de inmensos caudales y afanes, determinó desprenderse en vida de esta preciosa joya, objeto de todas sus delicias, para dedicarla a la instrucción de la juventud con un rasgo de beneficencia raramente visto”, según se dice en la memoria que se publicó con tal motivo. La biblioteca fue traslada a la Universidad de Valencia en 1785, a expensas del propio Bayer, colocando el mismo a modo de símbolo, los seis volúmenes de la Biblia Políglota Complutense.
Por desgracia parte de esta colección se perdió en el incendio que sufrió la biblioteca en 1812, en el asalto a Valencia del Mariscal Suchet.
Bibliófilos españoles. Sánchez Mariana, M.

07 agosto, 2007

Ruskin


Ruskin apóstol de la belleza, es también un “hombre de acción”. Su amor al libro es activo y fecundo; si el tiene libros, quiere que sus semejantes por humildes que sean, los tengan también. Con este propósito emprende Ruskin en Inglaterra ardientes cruzadas poniendo de manifiesto el valor y eficacia de los libros y al propio tiempo da numerosas conferencias para ayudar a la creación de Bibliotecas como la del Instituto de Rusholms, cerca de Manchester, demostrando que la lectura es exactamente una conversación con hombre mucho mas sabios y mas interesantes que los que podamos tener ocasión de conocer a nuestro alrededor.

06 agosto, 2007

La Biblioteca Salvá



Su biblioteca fue una de las mas importantes del siglo XIX.
Don Vicente Salvá y Pérez (1786-1849) fue muy precoz en los estudios de filosofía, teología, leyes y lenguas clásicas; a los 18 años enseñaba griego y a los 20 era catedrático de dicha lengua en Alcalá.
Cuando estalló la guerra de Independencia tuvo que regresar a su Valencia natal, en donde se hizo cargo de la librería que tenia su padre, pero siendo liberal como era, tuvo que exiliarse con Fernando VII, se estableció en Inglaterra, donde abrió una librería, y publicó varias obras de erudición y bibliografía, y formó biblioteca, se traslado a Paris y luego de nuevo a Valencia en 1847.
Su hijo Pedro Salvá y Mallén se inició con su padre en la librería de Paris, y publico junto con él varias obras eruditas, la mas importante es “Catálogo de la biblioteca de Salvá” publicado en Valencia en 1872, donde describe minuciosamente los mas de 4.000 libros que formaban la biblioteca familiar.
La biblioteca fue vendida años después en Londres, y una parte importante de ella fue comprada por un industrial andaluz, Ricardo Heredia y Livermoore, Conde de Benahavis, quien aumentó aun mas su biblioteca, ya que cuando esta se vendió en Paris en 1891 superaba los 8.000 volúmenes.

03 agosto, 2007

José Martínez Aloy


Martínez Aloy, recién publicada su obra “La Casa de la Diputación.” Valencia; Domenech, 1909-1910, 4º, ¨XIV-240 págs. 48 láminas, ofrendó un ejemplar al Presidente de la Diputación, pensando que este leería afanoso tan notable trabajo. Pasó tiempo, y Martínez Aloy se vio precisado a acompañar a una personalidad extrajera al Palacio de la Diputación. Allí fueron recibidos por el propio Presidente, con residencia en el mismo edificio. Martínez Aloy cita su libro, el Presidente se inflama, dice que lo ha releído, porque no lo separa de su cabecera... El Señor Martínez Aloy solicita el libro, porque con el en la mano podrá cumplimentar al extranjero, ¡El ejemplar estaba por cortar!.
Antonio Palau

02 agosto, 2007

Novalis


Del poeta Novalis(1772-1801. Friedrich Leopold von Hardenberg. Poeta y filósofo alemán)cuenta su ilustre traductor Juan Maragall que a los diez años, “leia apasionadamente poesias, y sobre todo baladas, que despues sabia contar muy bien a sus hermanos”, y que su aficion a los libros le inducia a saquear la biblioteca de su tio y es tan ferviente la fidelidad de Novalis a la Bibliofilia, que el dia de su prematura muerte aun pide ¡pobre Novalis! Unos libros que quisiera consultar.

01 agosto, 2007

Las lecturas de Goethe


Goethe nos explica el mismo cuales fueron sus primeras lectura predilectas:
El Orbis pictus, del pedagogo Comenius; la Biblia; la Historia Universal, de Abelin; la Acerra philologica, especie de antología clásica; las Metamorfosis, de Ovidio; el Telémaco; el Robinsón; el Viaje alrededor del mundo, del Almirante ingles lord Anson, por Walter y Robins; la Isla de Felsenburg, de Schanbel...
También leía con deleite ciertos libritos populares y tradicionales, que el mismo compraba en las paradas de las calles.
En esta biblioteca infantil de Goethe se adivina ya el instinto certero de su genio universal. Libros de imagenes, historia sagrada y profana, mitología, narraciones de viajes y aventuras, cuentos tradicionales... forman el bagaje intelectual de aquel niño, de una curiosidad vigilante, pensador y poeta, que iluminara el mundo con los fulgores de su genio.

Carlos Rahola